VPS Hola, soy Roxana, con 25 años estoy terminando la licenciatura en psicología, la carrera que me apasiona, desde de venir desde el interior a esta gran ciudad a estudiar, ya estaba cumpliendo mi sueño, vivía sola en un departamento, cubría mis gastos y estudiaba, en esos momentos estaba por empezar las pasantias así que […]
Relato erótico: «Vacaciones Frustradas» (POR WALUM)

Hola soy Vivian, tengo 34 años, realmente siempre me encanto la independencia, es por eso que me independice de mis padres aunque ya tarde tuve que hacerlo, aunque estaba viviendo con una amiga, decidimos cambiarnos por separado, yo conseguí un lindo departamento a muy bajo precio a unas cuadras de mis padres, era hermoso el […]
Relato erótico: «El florista» (POR WALUM)

Florista Hola soy Laura y esto sucedió hace como unos meses atrás, le cuento que soy profesora, tengo 31 años vivo en una linda casa que esta en el centro de la ciudad casi, es muy acogedor y para ser una mujer que vive sola nunca había tenido problemas con ningún vecino, mas que alguno […]
Relato erótico: «Otro loco» (POR WALUM)

Lz Hola soy Claudia, tengo 33 años, soy muy atractiva, demasiado, o sea en realidad mi cuerpo tuvo mucho que ver mis años de gimnasio, ya que siempre quise mantener todo en su lugar. Junto con mi cabello rubio bien claro y suavemente enrulado. Mis ojos color miel y grandes, mis pechos bien erguidos, desafiantes, […]
Relato erótico: «La profesora y el maniático» (POR WALUM).
Hola soy Claudia, tengo 33 años, soy muy atractiva, demasiado, o sea en realidad mi cuerpo tuvo mucho que ver mis años de gimnasio, ya que siempre quise mantener todo en su lugar. Junto con mi cabello rubio bien claro y suavemente enrulado. Mis ojos color miel y grandes, mis pechos bien erguidos, desafiantes, incitan, […]
Relato erótico: «Mi tia, el celador y yo» (POR WALUM)
Mi tia, el celador y yo. Con mis 18 años, era una chica excepcional, me gustaba que todos me miraran y debo admitir que tenia con que, mi altura 1.75 con mi cabellos rubios lacios, unos pechos muy erguidos medianos, una cintura estrechísima y mi cola bien paradita y menudita. No me podía quejar, llamaba […]